miércoles, 31 de agosto de 2011

Los que no pasan agosto


El asesinato a sangre fría de Manuel Gutiérrez, un niño de 16 años de edad, a manos de Miguel Millacura, suboficial de Carabineros, durante protestas ciudadanas convocadas recientemente, devela cuán distintas son las visiones de sociedad, de convivencia y de país que tenemos chilenas y chilenos dependiendo de la óptica de cada cual.
La tragedia que enluta a una modesta familia había sido anunciada en encendidos discursos de autoridades civiles y policiales. En el primero de los casos, tanto Sebastián Piñera, actual inquilino de Palacio, así como su ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, y el subsecretario de la misma cartera, Rodrigo Ubilla, además de Andrés Chadwick, vocero UDI, habían señalado a los cuatro vientos que el “violentismo, los encapuchados, los hijos de hogares mal constituidos o huachos (en palabras de Lobos, intendente de la región del

Bío Bío), eran los causantes de tanto vandalismo, saqueos y desmanes conducentes, tarde o temprano, a un desenlace fatal”. Pues bien: hasta ahora, desde el bullado “caso bombas”, pasando por Saif Khan, ciudadano pakistaní ilegalmente detenido y erróneamente acusado de portar trazas de explosivos cuando ingresó a la embajada de Estados Unidos para realizar trámites consulares, ningún policía ha sido asesinado por aquellas personas sindicadas como terroristas por las autoridades en comento. Las únicas víctimas, además de Manuel, han sido jóvenes que, al manipular bombas caseras, han resultado lesionados, y uno de ellos, muerto.

jueves, 25 de agosto de 2011

Una vez se disipe el olor a lacrimógena

Verbalizar la violencia y el odio incita a devolver cada insulto a piedrazos. La discriminación social, económica, de género o cualquier otra, busca sus propios caminos de autodefensa y, tal como dice una antigua canción “una gota y otra gota hacen tormenta y el vendaval no tiene vuelta, no hay quien lo detenga…”.
Eso es lo que sucede en Valparaíso a la hora en que escribo estas líneas. Centenares de jóvenes se enfrentan violentamente a carabineros de fuerzas especiales en diferentes puntos de la ciudad. El aire irrespirable a causa de la generosidad de la fuerza policíaca, que no escatima gastos. “No se fije en gastos, compadre”, habría dicho nuestro chilenísimo “Cumpa”, el de Condorito. Tal parece haber sido la instrucción de Hinzpeter: échenle humo y gas nomás, total pulmones jóvenes tienen aguante.

martes, 23 de agosto de 2011

El verdadero rostro del golpismo de civil




Allanamientos ilegales, sin autorización de fiscal alguno, detenciones por sospecha y selectivas, prepotencia en contra de estudiantes y quienes se manifiesten en las calles y amedrentamientos de diversa índole, es la impronta de Carabineros de Chile en estas últimas semanas.
Hace menos de dos horas, participé de una protesta en defensa de jóvenes Okupa cuya casa fue violentamente registrada, mobiliario y pertenencias destruidas, amenazas y gritos de parte de quienes, supuestamente, deben velar por la seguridad de la sociedad que les paga sus sueldos y prebendas.
A horas del paro nacional, el gobierno y sus fuerzas represivas se alistan para una batalla, una vez más, en contra de civiles desarmados, tal como ocurrió en 1973. ¿Qué inventarán ahora los poderes fácticos, la derecha retrógrada, la milicada, el gobierno de turno y este empresariado altamente ideologizado que tenemos en Chile a falta de un Plan Zeta?