martes, 14 de julio de 2009

Un domingo lleno de saudade

Yo ví a lo mejor de mi generación marchar alegre por las calles libres y dibujar futuros con pala y picota en las poblaciones anegadas,
y despertar sonriente porque cada mañana un mural nuevo indicaba el camino
y este pais lejano era el epicentro de un experimento único: la vía al socialismo con empanada y vino tinto, como dijo Salvador,
y bullía la universidad
y la fábrica
y el colegio tomado era una fiesta, pero también de allí surgía lo nuevo y no era necesario dormir pues el mundo lo construímaos entre todas y todos y era urgente terminarlo para que jugara el hombre nuevo...
ni siquiera decíamos, "la mujer nueva...",
pero, en fin;
Solíamos almorzar bajo un pez gigante de mimbre que colgaba del techo de un edificio tan reciente que cada parte aún no terminaba de secarse, mientras en la sede partidiaria discutíamos de todo escuchando ecos terribles venidos de lo oscuro,
y seguíamos marchando. Alegres, trabajólicos, enamorados de la vida y embriagados; porque esta oportunidad irrepetible de moldear la historia la tuvimos y aquellos mil días fueron pocos.
Yo ví las explosiones y las balas
y la voz de Allende en La Moneda, que sonaba fuerte y altanera, me recordó que un día le gritamos "¡reformista"!, al salir del aula en que estudiaba....
Ví el desfile de amigos engrillados y otros cuya sangre aún huelo..
la vida clandestina
la tortura
después de muchos días, el destierro.
Volver a caminar por esta calles colmadas de fantasmas hiere.
Hoy domingo de julio me despierto en un país sin sentido, oyendo discursos vacuos de tránsfugas candidatos
escucho el mismo eco oscuro de quienes mataron nuestra primavera hace ya mucho tiempo,
tanto, que fraguó la construcción aquella; el pez de mimbre se llevó a los suyos para salvarles de tanta miseria, la pala y la picota fueron rematadas por la iglesia, las canciones no se oyen pero resuena aún en mis oídos la voz de Salvador...
Una noche clandestina de miedos juveniles y convicción milenaria hablamos de la muerte y la posibilidad de no estar más, y nos abrazamos cual hermanos....eso fue hace mucho en un país que no existe.
Yo desperté este domingo. Otros nunca más.